Conociendo Estambul a mordiscos (y sorbos)
Estambul una ciudad que navega entre dos continentes, antigua capital del impero otomano y bizantino, no solo nos embruja con su historia y cultura, sino también con su sublime gastronomía: otra grandiosa muestra de la exquisita cocina mediterránea. Desde sus famosos kebab, que poco o nada tienen que ver con los que podemos ver en el resto del mundo, sus tradicionales gözleme, el baklava de entre su infinita lista de dulces que allí es casi religión, hasta su famoso café turco… Venid con nosotros a saborear los principales barrios de Estambul, la ciudad de las mil mezquitas.
Estambul a mordiscos
Descubriendo los Gözleme en The Han Restaurant (zona Sultanahmet)
En The Han Restaurant (Cakurtaran Mah., Alemdar Cad. No:20) hemos probado los mejores gözleme de todo el viaje y os garantizamos que no serán los únicos que probaréis. Los gözleme son una especie de crepes artesanos rellenos de queso, ternera, patata o espinacas; sin duda nuestros preferidos son los de queso feta.
Especialidades turcas en Karaköy Lokantası (zona Karaköy)
En el Karaköy Lokantası (Kemankeş Karamustafa Paşa, Kemankeş Cd. No:37) la calidad está asegurada. Su secreto una pequeña carta de comida tradicional turca con un toque moderno. Su decoración cuidada y su carta que cambian cada semana, hacen de este pequeño restaurante una parada obligatoria en vuestro viaje.
Donde los turcos van a comer pescado: Akın Balık (zona Karaköy)
El Akın Balık (Azapkapı, Fermeneciler Cd. Gümrük Han 40/A) es de los locales más auténticos en los que hemos comido en Estambul. Eso se percibe por los pocos turistas que veréis en su enorme terraza. Un lugar acogedor donde disfrutar de pescado y marisco fresco con vistas al Bósforo y al puente de Gálata.
El Kebab no es fastfood en el Iskender Kurulu (zona Besiktas)
En el Iskender Kurulu (Sinanpaşa, Akaretler, Süleyman Seba Cd. No:10) son especialistas en la variedad de iskender kebab, tradicional del norte de Turquía. No es el típico kebab, en este plato la carne se trocea y se sirve en un plato acompañada de yogurt, salsa de tomate y pedazos de pan untado en mantequilla. No es que sea una comida light, para que engañarnos, pero después de una largo día de caminata seguro que lo devoraréis.
Estambul a sorbos
Un té con vistas en Pierre Loti (zona Eyüp)
El restaurante Pierre Loti (Eyüp Merkez Mah, İdris Köşkü Cd.) está situado a 20 minutos del centro de Estambul, por lo que para llegar lo mejor es coger un taxi o un bus. Sin duda la aventura merecerá la pena ya que las vistas desde su terraza al estrecho del Bósforo son alucinantes.
*El nombre del local es debido a Pierre Loti, el sobrenombre empleado por Julien Viaud, un novelista de origen francés que acudía frecuentemente a este café para inspirarse y escribir sus obras.
Un té frente a la torre Gálata: el Konak Cafe (zona Karaköy)
El Gálata Konak Cafe (Bereketzade, Hacı Ali Sk. No:2) ofrece unas vistas al puente de Gálata y al skyline con las grandes mezquitas, que será difícil de olvidar. Si la espera para subir a la torre Galata es larga, sin duda esta terraza es la mejor sustituta.
Un rooftop para el atardecer: el Seven Hills (zona Eminönü)
El restaurante Seven Hills (Cankurtaran, Tevkifhane Sk. No:8 Kat:3) está situado en la terraza del hotel del mismo nombre y es el mejor lugar para fotografiar la Mezquita azul y Santa Sofía y obtener una panorámica del puente Galata desde el Estambul europeo.
BONUS: De postre, café y baklava
Nuestras recomendaciones quedan incompletas sin un postre. En un país donde el dulce es una religión y el pistacho su profeta, una parada en una confitería/cafetería es más que obligatoria. Las encontraréis dispersas por toda la ciudad y la variedad de pasteles es inmensa: baklaba (hechos a base de capas finísimas de pasta filo), lokum (pasta de gominola con frutos secos) o künefe (masa hecha con kadaif o fideo fino rellena de queso y pistacho).
El café es un símbolo social es Turquía, hay un refrán que dice que «beber una taza de café juntos garantiza cuarenta años de amistad». Por eso ha sido declarado por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, por lo que no podéis iros sin probar uno. El café turco se mezcla con agua en un recipiente de cobre y se añade el azúcar. Justo en el momento en que empieza a hervir se retira del fuego, se deja reposar y se sirve.
Os dejamos un mapa con las principales localizaciones que hemos comentado en post. Y vosotros, nos recomendáis algún otro lugar donde seguir devorando Estambul a mordiscos? No dudéis en comentar.
Si sois afortunados y vuestro viaje en Turquía continúa, os recomendamos leer nuestro post sobre las Costa Turquesa, un paraíso de playas al sur de Estambul.